En donde estes, que te vaya bien.

Hace algunos años, en un viaje a Sevilla, íbamos con un grupo de niños discapacitados con los que solía compartir mis fines de semana por aquél entonces. Todos querían subir en calesa y pasear por la ciudad, yo me ofrecí voluntario para quedarme en la plaza de España, con otra compañera y así vigilar que no nos robasen las sillas de ruedas de los chavales.
Recuerdo que hacía calor y que llevabamos toda la mañana de visitas... Mi compañera sugirió que porque no me sentaba en la silla de ruedas y así ella me llevaba a pasear por la plaza, de paso descansabamos... tras un rato paseando aparece un amigo que hace años había conocido en un campamento y que no había vuelto a ver, eran de Sevilla y ya que iba a estar allí unos días les había llamado.. Cuando llegaron y me vieron, se quedaron alucinados, no articulaban palabra, mi amigo el del campamento, iba con una chica muy mona de la mano, y como nadie decía nada, opté por presentarme yo mismo, con lo que le digo: - Hola yo soy Iván y tu?- y ella me dice yo Mara y cuando me va a besar le digo -espera que me levante mujer....- y claro ni por lo más remoto se me había ocurrido pensar que ellos pudieran creer que yo iba en la silla porque no podía caminar.. Pos no veais, la que montamos, la niña se mareó, el kiosquero que estaba al lao se le cayó lo que llevaba en las manos, mi amigo se quedó blanco... Al final me dijeron que eso era humor típico andaluz, que esas bromas los del norte no sabíamos hacerla... normal, yo lo hice con la menos de las intenciones....
Cuando llegaron todos nos dispusimos a terminar el día en isla mágica, yo estaba obcecado con montar en el tiovivo (siempre me han gustado), aunque mis compañeras, tenían otro plan, querían que me subiese en todas las atracciones de riesgo con ellas, porque dicen que asustado soy muy gracioso (la madre que las trajo)...Al final, logré subirme en el tiovivo, casí al límite de que cerrasen el parque, fue entonces cuando nos cruzamos por primera vez, nos miramos a los ojos y yo me morí durante unos minutos, nunca había sentido nada igual me había pasado la corriente electrica, sólo con la mirada, un escalofrío recorrió mi cuerpo... Cuando me bajé del tiovivo ya no estaba, simplmente estaban mis compañeros indicándome que el parque cerraba y que teníamos que salir ya....
Por obra del destino resultó que la persona de la mirada electrica, era de Asturias, nos volvimos a cruzar, y no sólo eso sino que tuvimos un affaire, a día de hoy estoy convencido que en ocasiones vale más vivir los momentos una sóla vez, ójala me hubiera quedado con lo de Sevilla y no hubiese intentado nada más. Otro día con ganas os cuento cositas.. por lo pronto me quedo con mi canción, la que escuche dos millones de veces mientras le olvidaba.
A día de hoy no sólo le he apartado de mis sentimientos, sino que le deseo que sea feliz. Espero que aclare sus pensamientos, que encuentre al amor de su vida, y que comprenda que yo no lo soy, ni lo fui nunca.